¿Enseña la Biblia la inteligencia emocional?

Siempre afirmamos que la Biblia es atemporal y que responde a las necesidades humanas comunes y complejas. Si esto es cierto, la inteligencia emocional es un tema sobre el cual la Biblia debería tener algo que decir. ¿Es nuevo este descubrimiento? ¿Existe alguna mención bíblica de su uso? ¿Jesús tenia inteligencia emocional? Estas preguntas deberían responderse en base a lo que la Biblia enseña.

¿Por qué hablar de este tema?

Este es un tema importante, porque el ser humano es un ser con emociones y sentimientos; y son éstos los que al final determinan las decisiones de las personas. EL ser humano normalmente decide en base a sus emociones.

¿Cuál es el valor de la inteligencia emocional?

Algunas de estas afirmaciones nos ayudarán a entender su valor: “Todo empezó con una serie de estudios sobre la inteligencia emocional, los cuales indicaron que las personas intelectuales más brillantes, no sueles ser las que más éxito tienen ni en los negocios ni en su vida privada”[1] “La inteligencia emocional puede proteger la salud y fomentar el crecimiento de las organizaciones. Si una empresa tiene las aptitudes que broten del conocimiento de uno mismo, la autorregulación, motivación y empatía, habilidad de liderazgo y comunicación abierta, es probable que sea más adaptable a lo que el futuro traiga”[2]

Todos han notado su importancia que hoy se enseña en las universidades: “El Postgrado en Inteligencia Emocional en las Organizaciones es un programa pionero en materia de inteligencia emocional enfocada a la organización. Con un programa modular que combina clases teóricas con un práctica y un proyecto final de estudios tutorizado por profesionales de reconocida experiencia, incluye un proceso de coaching que facilitará al alumno una atención personalizada a lo largo del curso.”[3]

¿Cuáles son algunas características de la gente emocionalmente inteligente?

Encontré 6 hábitos[4] (de los muchos que hay) que caracterizan a las personas emocionalmente inteligentes, pero antes de verlas, debo responder a dos preguntas importantes: ¿Jesús tenía inteligencia emocional? Si. En Lucas 2:52 nos menciona que Jesús crecía en “gracia para con los hombres”; ¿menciona la Biblia estas características? La respuesta es sí, éste este término surgió en los inicios de siglo XX[5], casi dos mil años después de la Biblia. Estudiemos algunas de las características.

 

Se centra en pensar lo bueno: Esto no significa que no hagan caso de las malas noticias sino que toman la decisión inteligente de no gastar mucho tiempo y energía en los problemas. En lugar de eso, se centran en lo positivo de una situación y buscan soluciones al problema. Estas personas se centran en lo que son capaces de hacer, en lo que está bajo su control. La Biblia enseña esto en Filipenses 4:8: “Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza.” Para poder ser emocionalmente inteligentes, debemos dedicar más tiempo a los buenos pensamientos.

Se rodea de gente que piensa lo bueno: Las personas emocionalmente inteligentes pasan tiempo con otras personas que son positivas y ven el lado bueno de la vida. Las personas que sonríen mucho, tienden a atraer más a las personas. La Biblia enseña sobre la importancia de la gente que nos rodea: “Dios bendice a quienes no siguen malos consejos ni andan en malas compañías ni se juntan con los que se burlan de Dios” Salmo 1:1; “Querido jovencito, si los malvados quieren que te portes mal, no te dejes llevar por ellos” Proverbios 1:10. Llegamos a ser el reflejo de las personas que nos rodean. Elije bien tus amistades.

Establecen límites: Dado su carácter amable y abierto puede que se vean como ingenuos para algunas personas. Sin embargo, las personas con alto coeficiente emocional son capaces de establecer límites y hacerse valer cuando sea necesario. Demuestran calidez y consideración, pero se mantienen firmes al mismo tiempo. “Mirad, yo os envío como ovejas en medio de lobos; por tanto, sed astutos como las serpientes e inocentes como las palomas” Mateo 10:16; “Si van a hacer algo digan que sí, y si no lo van a hacer digan que no” Mateo 5:37. Miden sus respuestas a situaciones en las que pueda haber conflicto. Piensan antes de hablar y se toman un tiempo para calmarse. “Hablen siempre de cosas buenas, díganlas de manera agradable, y piensen bien cómo se debe contestar a cada uno.” Colosenses 4:6.

Dejan atrás el pasado: Las personas con alto coeficiente emocional están demasiado ocupadas pensando en todas las posibilidades que les brinda el futuro como para perder el tiempo en cosas que no funcionaron en el pasado. EL apóstol Pablo había mencionado esto en Filipenses 3:13 “pero una cosa sí hago: me olvido ciertamente de lo que ha quedado atrás, y me extiendo hacia lo que está adelante.” Aprende del pasado, pero no vivas en él.

Buscan hacer su vida más divertida, feliz e interesante: hay dos cosas que pueden ayudarnos a ser más felices: la actitud ante la vida y el valor que le damos a los demás. Somos nosotros los que decidimos si vamos a tener un buen o mal día. El Salmo 118:24 nos desafía a tener una misma actitud todos los días “Este es el día que hizo Jehová;
Nos gozaremos y alegraremos en él” Esto no depende de nada externo, depende de uno mismo. También el agregar valor a las vidas que nos rodean nos brinda mayor satisfacción. Lucas nos recuerda en Hechos 20:35: “Les he enseñado que deben trabajar y ayudar a los que nada tienen. Recuerden lo que nos dijo el Señor Jesús: “Dios bendice más al que da que al que recibe.” Si vivimos de esta manera, la vida nunca será aburrida y triste.

No culpan a otros de sus errores: esta actitud hace que reconozcamos nuestros errores y nos enfrentemos a las consecuencias con responsabilidad. Culpar a otros, solo retrasa lo inevitable y no soluciona nada. Esta experiencia aporta madurez y superación en todas las áreas de la vida. Si aprendemos esto, seremos más precavidos en lo que hacemos. “No crean ustedes que pueden engañar a Dios. Cada uno cosechará lo que haya sembrado” Gálatas 6:7.

Conclusión.

La Biblia contiene los principios bíblicos que proveen de una alta inteligencia emocional al cristiano.

El cristiano que estudia los principios de relacionamiento interpersonal e intrapersonal que se encuentran en la Biblia, y los practica, gozará una inteligencia emocional alta, que hará crecer su influencia en el entorno en que se desempeña.

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[1] http://www.gestiopolis.com/inteligencia-emocional-aplicada-al-liderazgo-y-a-las-organizaciones/

[2] Goleman, La inteligencia emocional en la empresa. (1999)

[3] Descripción de curso de Diploma de Especialización/de Postgrado en Inteligencia Emocional en las Organizaciones por la Universitat de Barcelona.

[4] http://www.recursosdeautoayuda.com/habitos-de-las-personas-con-inteligencia-emocional/

[5] Edward L. Thorndike (1920), David Wechsler (1940), Howard Gardner (1983)

*Versiones bíblicas utilizadas: RVR; TLA; LBLA; NVI; NTV.