“Y
conoceremos, y proseguiremos en conocer a Jehová; como el alba está
dispuesta su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la
lluvia tardía y temprana a la tierra”
Oseas
6:3
Si
hay algún esfuerzo que valga la pena para nuestra vida espiritual,
es el de conocer más Dios. Hiciste algún esfuerzo por conocer más
a Dios? Hace cuanto que lo hiciste? Hace cuanto que te acercaste a tu
creador y Padre Celestial con el simple y solo anhelo de conocer más
de Él? Lastimosamente, en la matoría de los casos nos acercamos
sólo para pedir y pedir. En el mejor de los casos agradecemos, pero
muy pocas veces queremos saber más sobre Él.
Lastimosamente
hoy día, Dios no solo tiene que soportar a gente que no tiene mucho
interés en conocerlo, sino que también a personas que dudan de su
existencia. Es por esto que quiero tratar el primer punto de hoy como
sigue:
A.
Existe realmente Dios.
Algunas
corrientes filosóficas muy de moda en nuestros tiempos que no apoyan
la existencia de Dios son:
- El Humanismo.El hombre es el centro de todo. Es la doctrina que sitúa al ser humano como medida de todas las cosas, y defiende que los intereses de los seres humanos es aquello que debe recibir atención moral por encima de cualquier otra cosa.Toda la atención de todos debe fijarse sólo en el hombre, así Dios queda a un lado.
- Ateismo. Dios no existe. Salmo 14:1
“Dice
el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras
abominables; No hay quien haga el bien”.
Muchos
han preferido negar a Dios, antes que reconocer que todo lo que
anhela su corazón es malo y corrupto. Para dar tranquilidad a sus
conciencias prefieren olvidar que hay un Dios de justicia.
Cuando
en en Siglo XVII, se redacto la Confesión de Fe de Westminster, este
punto ya estaba definido, no por los hombres, sino por Dios.
P.
2. ¿Cómo sabemos que hay Dios? Catecismo Mayor de W.
R.
La mera luz de la naturaleza en el hombre y las obras de Dios
manifiestan plenamente que él existe, c) pero su palabra y espíritu
son los únicos que suficiente y eficazmente lo revelan a los hombres
para la salvación de ellos.
Por
medio de la Palabra y el Espíritu, hoy podemos saber que esto es
cierto...Dios existe. Amén.
Además,
quiero citar sólo tres argumentos sencillos para corroborar lo que
digo.
- Argumento cosmológico.Sostiene que todo lo que existe tiene una causa que, a su vez, tiene otra causa, y así sucesivamente remontándose hasta llegar a la causa primigenia, o sea, Dios; no admitía que la serie de causas pudiera ser infinita.Genesis 1:1
“En
el principio creó Dios los cielos y la tierra”.
- Argumento teleológico.Es el argumento sobre la existencia de Dios que se basa en la premisa de que existiría una evidencia percibida de un mundo y un universo "diseñado". Se basa en aquellos aspectos del mundo que al ser complejos, parecen haber estado diseñados; y que en consecuencia, parecen obedecer un objetivo o una finalidad de un ser inteligente. (no hay reloj sin relojero)Genesis 1:1-31
Este
pasaje muestra el orden de la creación de Dios. Nada quedó al azar.
Todo fue bueno.
- Argumento de la existencia de la ley moral. Rom 2:15Existe una ley moral, absoluta, universal, inmutable, que prescribe el bien, prohibe el mal y domina en la conciencia de todos los hombres. Ahora bien, no puede haber ley sin legislador
(Rm
2:15 [RV1960])
mostrando
la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su
conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos,
Dios
es el legislador que ha escrito su ley en nuestros corazones.
Ahora
bien, si creemos que Dios existe y hoy nos damos cuenta que debemos
esforzarnos por conocer a Dios... que podemos hacer para lograrlo?
B.
Como podemos conocer más a Dios.
- Una busqueda sincera de Dios. Jeremías 29:13; Proverbios 8:17; Lamen 3:25
La
actitud que tenemos hacia Dios es importante para que podamos conocer
más de Él.
(Jer
29:13 [RV1960])
y
me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro
corazón.
A
pesar de que los cautivos se encontraban en un lugar y tiempos
difíciles, no debían desesperarse porque tenían la presencia de
Dios, el privilegio de la nación y la gracia de Dios. Podemos buscar
y encontrar a Dios cuando lo buscamos de todo corazón. Tierras
extrañas, tristezas, frustración o problemas físicos, no pueden
romper esa comunión.
(Pr
8:17 [RV1960])
Yo
amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan.
madrugando—es
decir, con diligencia; puede que incluya la idea de temprano en la
vida, de niño o también que buscar a Dios sea la promera cosa que
hagamos en el día. Dios tiene algo especial para cada uno de
nosotros si le damos el primer lugar.
(Lm
3:25 [RV1960])
Bueno
es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca.
La
repetición de la voz “bueno” al principio de los tres versículos
que siguen, realza el efecto. Esperaré. No hay nada mejor que el
alma sedienta que se sacia del agua viva que sólo Dios puede darnos.
Pero
la actitud debe ir acompañada de la acción... por lo tanto no
podemos dejar de lado la:
- Revelación especial: La Biblia. Hebreos 1:1-2; 2 Timoteo 3: 14-15
P.
3. ¿Qué es lo que principalmente enseñan las Escrituras? Catecismo
Menor de W.
R.
Lo que principalmente enseñan las Escrituras es lo que el hombre ha
de creer respecto a Dios y los deberes que Dios impone al hombre.
(He
1:1-2 [RV1960])
Dios,
habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a
los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado
por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien
asimismo hizo el universo;
El
es el cumplimiento y la culminación de las revelaciones de Dios a
través de los siglos. Cuando lo conocemos, tenemos todo lo que
necesitamos para ser salvos de nuestro pecado y tener una perfecta
comunión con Dios, pero sólo la Biblia nos habla de Cristo.
(2Ti
3:14-15 [RV1960])
Pero
persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de
quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas
Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por
la fe que es en Cristo Jesús.
Con
muchos falsos maestros alrededor y las presiones inevitables de un
ministerio en crecimiento, Timoteo pudo fácilmente abandonar su fe o
modificar su doctrina. Una vez más Pablo le aconseja que mire su
pasado y se aferre a las enseñanzas básicas acerca de Jesús que
son verdades eternas. Como Timoteo, nosotros también estamos
rodeados por falsas enseñanzas, pero no debemos permitir que nuestra
sociedad distorsione o aplaste la verdad eterna de Dios. Cada día
debemos dedicar tiempo a pensar en los fundamentos de nuestra fe
cristiana que se encuentran en la Palabra de Dios, las grandes
verdades que edifican nuestra vida.
Timoteo fue uno de los
primeros en la segunda generación de cristianos: llegó a ser
cristiano no por medio de la predicación de un evangelista que
hubiera predicado un tremendo sermón, sino debido a que su madre y
su abuela le enseñaron las Sagradas Escrituras desde que era un niño
(1.5). La labor de los padres es de una importancia vital. Tanto en
casa como en la iglesia es necesario entender que enseñar a los
niños es tanto una oportunidad como una responsabilidad. Jesús
quería que los niños vinieran a El (Mat_19:13-15). A semejanza de
la madre y abuela de Timoteo, Eunice y Loida, haga su parte en guiar
a sus hijos a Cristo.
Debemos mirar a
Jesucristo para conocer más a Dios.
- Jesucristo: El Hijo de Dios. Juan 14:6-7; 17: 3, 26
(Jn
14:6-7 [RV1960])
Jesús
le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al
Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también a mi Padre
conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
Aquí
hay una profunda verdad: el conocimiento de Jesús lleva al
conocimiento del Padre. En esta ocasión , ninguno de los apóstoles
había captado la profunda verdad de que Dios se ha hecho conocer por
medio de Jesús. Debemos de saber que si hemos conocido al Hijo de
Dios, a Dios mismo hemos conocido.
(Jn
17:3 [RV1960])
Y
esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios
verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
¿Cómo
obtenemos la vida eterna? Jesús nos lo dice aquí con claridad:
conociendo a Dios el Padre a través de su Hijo, Jesucristo. La vida
eterna requiere que los creyentes entremos a una relación personal
con Dios en Jesucristo nuestro Señor. Esta relación sólo se logra
por medio de la fe en Jesús.
(Jn
17:26 [RV1960])
Y
les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que
el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos.
Jesús
vino al mundo con el propósito de revelar al Padre, de darlo a
conocer. Él fue el perfecto espejo de la majestad divina, reflejando
el esplendor de la gloria del Padre. La expresión “dar a conocer
tu nombre” significa “dar a conocer la misma persona de Dios”.
Jesus
fue quien nos dío a conocer al Padre.
Ahora
podemos leer la Biblia, estudiar más sobre Jesús, pero sin la fe...
todo será en vano.
- La Fe. Hebreos 11:6; Efesios 2:8-9
(He
11:6 [RV1960])
Pero
sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se
acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le
buscan.
Creer
que Dios existe es sólo el comienzo; aun los demonios creen
(Jam_2:19-20).
Dios no se conformará con un simple conocimiento de su existencia.
El quiere una relación personal y dinámica con usted que
transformará su vida. Quienes con sinceridad lo buscan hallarán que
son premiados con la presencia íntima de Dios.
(Ef
2:8-9 [RV1960])
Porque
por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros,
pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Llegamos
a ser cristianos mediante el don inmerecido de Dios, no como el
resultado de algún esfuerzo, habilidad, elección sabia o acto de
servicio a otros de nuestra parte.
Debido
a que nuestra salvación e incluso nuestra fe son regalos, debiéramos
responder con gratitud, alabanza y alegría.
Si
la fe nos hace agradable a Dios y nos la dio como un regalo sin
haberlo merecido... no podemos dejar de interesarnos en conocer más
a ese Dios que nos ama tanto.
Jesús
le dijo a sus discípulos que querian que les haga, ellos pidieron
que les aumente la fe, que nos impide hacer los mismo?
- El Espíritu Santo. Juan 14:26
(Jn
14:26 [RV1960])
Mas
el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi
nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo
que yo os he dicho.
Jesús
prometió a los discípulos que el Espíritu Santo los ayudaría a
recordar lo que El les enseñó. Esta promesa asegura la validez del
Nuevo Testamento. Los discípulos fueron testigos de la vida y las
enseñanzas de Jesús, y el Espíritu Santo los ayudó a recordar sin
omitir sus perspectivas individuales. Podemos confiar en que los
Evangelios narran muy bien lo que Jesús enseñó e hizo (véase
1Co_2:10-14).
(1Co
2:10-14 [RV1960])
Pero
Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu
todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.
Porque
¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu
del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de
Dios, sino el Espíritu de Dios.
Y
nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu
que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido,
lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría
humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo
espiritual a lo espiritual.
Pero
el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios,
porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente.
El
Espíritu Santo puede ayudarnos de la misma manera. Al estudiar la
Biblia, podemos confiar que El plantará la verdad en nuestra mente,
nos convencerá de la voluntad de Dios y nos la recordará cuando nos
apartemos de ella.
- La obediencia. Juan 14:21; Filipenses 2:13
(Jn
14:21 [RV1960])
El
que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el
que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me
manifestaré a él.
Cuando
vivimos según sus normas, El no nos abandonará; vendrá a nosotros,
estará en nosotros y se nos manifestará. Dios sabe lo que sucederá
y, como El estará con nosotros en todo momento, no debemos temer. No
es necesario que conozcamos el futuro para tener fe en Dios: debemos
tener fe en El para estar seguros acerca del futuro y ver su poder en
favor nuestro. Así conocemos su gran amor por nosotros.
(Fil
2:13 [RV1960])
porque
Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por
su buena voluntad.
¿Qué
debemos hacer cuando no sentimos obedecer? Dios no nos ha dejado
solos en nuestros conflictos para hacer su voluntad. El quiere venir
a nuestro lado y estar con nosotros para ayudarnos. El nos ayuda a
querer obedecerle y luego nos da el poder para hacerlo. El secreto
para cambiar nuestras vidas es someternos a su control y dejarle
actuar en nosotros. La próxima vez pedíle a Dios que te ayude a
querer hacer su voluntad, así vas a poder conocer su fidelidad,
porque ël cumple sus promesas.
Todo
lo que hemos oido, leído, estudiado, orado, obedecido y compartido
en muchas ocasiones no puede caer en un saco roto... todo debe
reflejarse en nuestro día a día.